DOI: https://doi.org/10.71112/jw8rgy52
970 Revista Multidisciplinar Epistemología de las Ciencias | Vol. 2, Núm. 2, 2025, abril-junio
un entramado esencial en el mecanismo funcional de las empresas, en tanto que sus intereses,
expectativas y respuestas condicionan, de manera directa o indirecta, los resultados
estratégicos de la organización. Comprender su rol implica adentrarse en las tramas
relacionales que vinculan las aspiraciones sociales con los núcleos decisorios de la gestión
empresarial, otorgándoles no solo relevancia operativa, sino legitimidad sistémica.
Desde esta perspectiva, los stakeholders deben ser concebidos como actores
estructurantes del ecosistema corporativo. Su identificación no se limita a una tipología estática,
sino que abarca una diversidad de sujetos —internos y externos— que se ven afectados, y a su
vez afectan, las dinámicas institucionales. Rodríguez (2024) delimita esta categoría incluyendo
tanto a los sujetos internos, como empleados y accionistas, como a los actores externos, tales
como consumidores, proveedores, comunidades locales y otros agentes cuya vinculación con
la empresa posee una dimensión estratégica.
La gobernanza colaborativa encuentra precisamente en esta red de interdependencias
su fundamento teórico y práctico. Este modelo organizacional, que privilegia la horizontalidad,
la participación efectiva y el diálogo continuo, reconoce en los stakeholders no simples
elementos periféricos, sino voces fundamentales en la construcción colectiva de las decisiones
organizativas. Lejos de operar como instrumentos funcionales, los grupos de interés se
constituyen en interlocutores indispensables, cuya implicación activa promueve no solo la
legitimidad de los procesos internos, sino la sostenibilidad a largo plazo de la organización
como sistema social abierto.
En tal sentido, su participación no debe entenderse únicamente en términos reactivos o
consultivos, sino como una praxis colaborativa orientada al codiseño de políticas, estrategias y
valores organizacionales. De este modo, los stakeholders asumen una función coparticipativa
en la sinergia de la gobernanza, donde el consenso, la rendición de cuentas y la
corresponsabilidad constituyen principios rectores del equilibrio corporativo.